Unidad Nacional Azul y Blanco solicita al Banco Mundial condicionar financiamiento al régimen de Daniel Ortega

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UNAB dirigió comunicado al Banco Mundial para fiscalizar cualquier tipo de ayuda que brinden a la Dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo • Foto: UNAB/Cortesía

La Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) celebró la resolución del Directorio Ejecutivo del Banco Mundial a favor de un conjunto de operaciones de apoyo de emergencia para ayudar a países en desarrollo a enfrentar las consecuencias sanitarias, sociales y económicas de la pandemia del Coronavirus, pero expresó su preocupación por la forma en que el régimen de Daniel Ortega ha manejado la emergencia sanitaria en el país, donde la falta de transparencia, el secretismo y el acceso a la información es completamente nula.

“Aplaudimos que esta noble y consecuente decisión del Directorio se enfoca en la pobreza, así como su énfasis en el financiamiento basado en políticas y en la protección de los hogares más vulnerables y del medioambiente”, expresa la misiva enviada este 30 de abril de 2020.

La UNAB expresa que, hasta ahora, el Gobierno de Nicaragua no ha seguido en forma apropiada las orientaciones de la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud OMS/OPS para prevenir y contener la transmisión del virus, ni para desarrollar un enfoque multisectorial, que incluya a la sociedad civil, con el objetivo de aplicar medidas públicas que desaceleren el contagio.

A su vez, la Unidad Nacional destacó que Nicaragua es el único país de la región donde el secretismo es política de Estado. “Periodistas Independientes tienen prohibido acceder a conferencias de prensa y otros eventos públicos del Gobierno. Este perverso secretismo, con el supuesto objetivo de evitar alarmar e inducir normalidad”.

La petición de la Unidad Nacional Azul y Blanco se da luego de que el Gobierno de Nicaragua solicitará fondos al Banco Mundial, para la primera fase de proyectos del Programa Estratégico de Preparación y Respuesta al Covid-19.

“Solicitamos al Señor Presidente, y por su digno medio al Directorio Ejecutivo del Banco, que consideren muy especialmente para el caso de Nicaragua enfatizar en todas las condicionalidades previstas en sus políticas de asistencia financiera para asegurar que la ayuda que se otorgue a su Gobierno se use con transparencia, con todas las previsiones contra su desvío hacia otros fines, en forma disimulada o bajo subterfugios, o para ser usada con criterios políticos o con fines de premiar o castigar a sus clientelas según sus lealtades al Gobierno. De igual manera, condicionalidades con relación al respeto de los Derechos Humanos, Gobernabilidad y prevención del lavado de activos deben ser reforzadas para el caso de Nicaragua”. Esto, según la UNAB, ante el secretismo, la particular falta de transparencia y la absoluta exclusión de actores de la sociedad civil en las políticas con que el régimen aborda la pandemia.

Las condicionalidades deben apuntar, según la UNAB, a los siguientes criterios:

1. Condición básica de respeto a los Derechos Humanos, es que el Gobierno libere de inmediato a los presos y la presa política, cese el acoso y la represión a la ciudadanía y el restablezca las libertades públicas consagradas en nuestra Constitución. Se deberá reafirmar que el acceso a la salud es un derecho constitucional que no acepta ningún tipo de discriminación, especialmente, en las actuales condiciones de Nicaragua, ninguna discriminación contra personas

Críticas al gobierno.

2. En cualquier contrato de asistencia financiera el Banco deberá asegurarse del uso transparente de la misma, realzando su derecho de llevar la debida diligencia en la supervisión de su ejecución. Esta rendición de cuentas deberá ser certificada por una instancia supervisora del Banco, que deberá informar mensualmente acerca de la ejecutoria de los proyectos ante una instancia observadora local con representantes de la entidad ejecutora, el supervisor o auditor social del Banco y al menos dos representantes de organizaciones profesionales de la sociedad civil nicaragüense. La información del supervisor del Banco deberá fluir periódicamente, con detalles, desde un sitio web de acceso público, para contrarrestar temores de desvío de fondos hacia el financiamiento de actividades represivas o de programas sociales politizados.

3. Previo al primer desembolso el Gobierno de Nicaragua debería hacer pública su estrategia ante la pandemia, que incluya las principales recomendaciones de la OMS/OPS para la detección temprana de contagios, reducción de la tasa de trasmisión, disposición de sus mejores capacidades para el tratamiento de casos confirmados y –muy en primer lugar-- para la protección del personal sanitario. Deberán decretarse medidas inmediatas para reducir concentraciones humanas,  sí como la suspensión, total o parcial, de clases en escuelas y universidades, según corresponda en cada etapa de la crisis. Esta estrategia deberá incluir la participación de diversos actores sociales en la concertación de políticas públicas de prevención, educación y promoción de la participación ciudadana en la contención y manejo de esta crisis sanitaria.

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La Coalición Nacional en semanas anteriores también envió una misiva al embajador de la Unión Europea en Nicaragua, Pelayo Castro, con el fin de que se pidiera al gobierno nicaragüense una estrategia para prevenir el Coronavirus antes de desembolsar cualquier fondo de ayuda, esto tras anunciarse un fondo de 918 millones de euros para América Latina y el Caribe para combatir el Covid-19.

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