Sábado de terror en Nicaragua

El día empezó con el hallazgo del cadáver del ciudadano estadounidense Sixto Henry Vera, quien también tenía nacionalidad ecuatoriana. En la escena, dos vehículos quemados y el cuerpo tirado en la pista de Rubenia, en Managua.

Según La Prensa, vecinos de Rubenia escucharon un fuerte sonido durante la madrugada, cerca de la Cooperativa de Buses Parrales Vallejos, cuando salieron de sus casas vieron que una camioneta había impactado por detrás a un carro, de donde se bajaron dos hombres heridos, uno de ellos salió corriendo y pidiendo ayuda, el otro cayó en el pavimento.

El diario agrega que el hombre que salió corriendo fue auxiliado por un motorizado. Mientras que de la camioneta se bajaron unos hombres que remataron al que había quedado en el suelo y luego quemaron los vehículos.

La embajadora estadounidense en Nicaragua, Laura Dogu, se pronunció en su cuenta de Twitter. “La muerte de un ciudadano de EE. UU. es de gran preocupación para la embajada”.

Vilma Rosas González, jefa de relaciones públicas de la Policía Nacional, a tono con el comunicado de la Presidencia, responsabilizó del crimen a los jóvenes que protestan en la Universidad Politécnica de Nicaragua (Upoli), aunque no mostró evidencias de cómo ocurrieron los hechos.

“A las 12:30 de la madrugada, 02 de junio, sector de cooperativa de buses Parrales Vallejos. Grupos delincuenciales, encapuchados, con armas de fuego, morteros y bombas molotov, quienes operan en el sector de la Upoli, asesinaron al ciudadano Sixto Henry Vera, ocasionaron lesiones gravísimas al ciudadano Marcos Pomares Varela e incendiaron dos vehículos”, dijo González.

El ataque a Masaya

Decenas de antimotines y las fuerzas de choque de Daniel Ortega y Rosario Murillo atacaron a los pobladores de Masaya y La Concepción. Al menos, cinco personas fueron asesinadas y 32 detenidas.

Álvaro Leiva, secretario ejecutivo de la Asociación Nicaragüense Pro-Derechos Humanos (ANPDH), dijo que los fallecidos fueron identificados como Donald Ariel López (27 años), Rigoberto Carballo (28 años) Junior Gaitán (15 años), el oficial Eduardo José López (37 años) y un hombre conocido como “El Mono”.

La mayoría de los asesinatos ocurrieron en el sector de la parroquia San Miguel. La iglesia amaneció sonando las campanas para alertar sobre la represión policial.

Durante la represión fueron arrestados al menos 32 personas. Posteriormente, luego de una mediación de la iglesia y la ANPDH, 21 de los detenidos fueron liberados en la delegación policial de Masaya, los otros 11 fueron trasladados a la Dirección de Auxilio Judicial, en Managua.

La Prensa informó que horas después de haber liberado a 21 detenidos, la Policía Nacional capturó a otros 20 manifestantes.

En el municipio de La Concepción, los antimotines y los paramilitares aprovecharon que en el tranque ubicado en la parada El Recuerdo, había amanecido un pequeño grupo de personas para atacarlo. Luego se unieron otros pobladores del lugar para defender el tranque.

Entre los heridos graves está Wilmer Javier Calero (23 años), quien fue trasladado por el Benemérito Cuerpo de Bomberos desde la Concepción hasta el hospital privado Harmin, Jinotepe, Carazo. Wilmer Calero tiene heridas en pómulo, piernas y cabeza.

Hijo de expolicía despedida muere en accidente de tránsito   

Adolfo Enrique Castellón Aráuz (27 años) hijo de la expolicía María Teófila Aráuz, murió en un accidente de tránsito.

María Teófila Aráuz fue expulsada de la Policía Nacional por apoyar protestas y poner en su estado de WhatsApp el video de la emblemática canción “Que vivan los estudiantes” de Los Guaraguaos.

María Teófila llegó al sitio del accidente donde fue impactado el vehículo taxi que conducía su hijo, producto del cual falleció y conoció que una mujer era la que manejaba el auto que conducía en sentido contrario, en el mismo carril.

En el lugar la expolicía conoció que quien impactó el vehículo taxi de su hijo iba ebria, sin embargo, amistades y familiares de Aráuz, señalaron que la impresión que tuvieron al ver a la supuesta conductora era de una persona “dopada”. “Yo siento que esto que pasó fue dirigido, no fue un accidente de tránsito así por así”, dijo Aráuz.

María Teófila Aráuz, (48 años) denunció el despedido de forma arbitraria de la Policía Nacional solo por apoyar la protesta estudiantil. Fue despedida el pasado 6 de mayo después de que puso en su estado de WhatsApp el video de la canción “Que vivan los estudiantes” y comentó: “los mejores videos y el que más me inspira es el del 19 de abril duela a quien le duela…”.

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